Ningun gobierno latinoamericano tenía reportes de ciudadanos de sus países muertos o heridos por el terremoto y tsunami del viernes en Japón, país al que varias naciones le ofrecieron ayuda para superar la emergencia.El embajador de México en Japón, Miguel Ruiz Cabañas reportó a la cadena Televisa que en la ciudad de Sendai, donde la policía informó que encontró entre 200 y 300 cadáveres, la embajada tiene registrados unos 60 mexicanos.
"Hemos logrado establecer contacto con algunos de ellos y nos dicen que están bien, pero no tenemos contacto con todos los mexicanos", dijo el diplomático.
El presidente chileno Sebastián Piñera indicó que está en contacto con la embajada de su país en Japón y que no han tenido reportes de conciudadanos en peligro.
En Brasil, el gobierno manifestó condolencias por las pérdidas humanas causadas por el sismo y se mantuvo alerta por la posibilidad de que hubiera brasileños entre las víctimas.
Un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores dijo que la embajada en Tokio y los consulados generales en Nagoia y Hamamatsu no han recibido noticias de brasileños muertos.
En Japón hay una comunidad brasileña de 254.000 personas, la mayoría concentradas en el centro y sur del país asiático, una de las áreas menos afectadas por el terremoto.
Desde Caracas, la Cancillería informó en comunicado que unos 400 venezolanos viven en Japón, aunque no todos habían sido contactados tampoco tenían informes de que alguno haya sido víctima del sismo. El gobierno del presidente Hugo Chávez expresó su pesar por la tragedia.
La presidenta Cristina Fernández expresó la solidaridad de Argentina y ofreció colaboración para las tareas de rescate.
"Japón ha sido generosa en la ayuda a otros pueblos que han sufrido por guerras o catástrofes, desde terremotos hasta hambrunas y no tenga dudas que tanto nuestro país como el resto del mundo estarán junto a usted", manifestó Fernández en una misiva enviada al primer ministro de Japón Naoto Kan.
También el mandatario boliviano Evo Morales le escribió al primer ministro japonés para expresarle la "disposición del gobierno de Bolivia para colaborar en lo que estime necesario ante esta lamentable situación". La Cancillería del país andino informó que unos 7.000 bolivianos radican en Japón pero que no tiene informes que ninguno haya resultado perjudicado por el desastre.
El gobernante de Perú Alan García se solidarizó con Japón y ofreció "dentro de nuestras posibilidades de brindar ayuda a un pueblo amigo".
La Cancillería de Colombia informó que "todos los colombianos (residentes en Japón) están bien y hasta el momento no tenemos reporte de nacionales afectados por el terremoto y el tsunami". El presidente Juan Manuel Santos dijo estar conmovido por las imágenes del sismo y se solidarizó con los japoneses.
El cónsul uruguayo en Tokio, Pablo Vallarres, informó que buscaba contactar con los más de 130 uruguayos que están en Japón. Aclaró que no tenía reportes de que ninguno estuviera afectado.
En República Dominicana, el presidente Leonel Fernández envió una comunicación a Kan en la que le escribió su deseo de que "los efectos devastadores puedan ser mitigados con prontitud" y ofreció "los modestos recursos con que cuenta la República Dominicana a los fines de restaurar la zona devastada".
El embajador en Tokyo, Pedro Vergés, dijo que no tenía información de dominicanos afectados por el terremoto o tsunami, aunque no existe un registro detallado de cuantos habría, según un comunicado de la Cancillería.
El presidente de Guatemala, Alvaro Colom, expresó su solidaridad con el pueblo japonés e indicó que hay 220 guatemaltecos registrados en la sede consular en ese país y al parecer "todos están bien".
La Cancillería de Ecuador informó que no tiene reporte de víctimas ecuatorianas por el sismo en Japón.
La vicecanciller hondureña Mireya Agüero reportó que los 80 conciudadanos que viven en Japón están a salvo.
La cancillería de El Salvador expresó sus condolencias a Japón e informó en un comunicado que no se reportan víctimas entre los 180 salvadoreños residentes en la nación asiática.
El canciller costarricense, René Castro, informó que "debido a que no hay teléfonos ni otras formas de comunicación, las redes sociales y Skype han sido las formas de comunicación más comunes, incluyendo con nuestro cuerpo diplomático" en Japón. Al momento de la conferencia de prensa, habían hablado solo con 7 de los más de 200 connacionales que viven en la nación asiática.
Aparte de rastrear a ciudadanos de sus países, varios gobiernos latinoamericanos con costas en el Pacífico alertaron a las poblaciones costaneras a que estén atentas por la posible llegada de marejadas. (Elcaribe.com.do).
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